martes, 30 de agosto de 2011

EL ROMANTISISMO

EL ROMANTISISMO

Es un movimiento cultural y político originado en Alemania y en el Reino Unido a finales del siglo XVIII como una reacción revolucionaria contra el racionalismo de la Ilustración y el Clasicismo, confiriendo prioridad a los sentimientos.

Su característica fundamental es la ruptura con la tradición clasicista basada en un conjunto de reglas estereotipadas. La libertad auténtica es su búsqueda constante, por eso es que su rasgo revolucionario es incuestionable.

Debido a que el romanticismo es una manera de sentir y concebir la naturaleza, la vida y al hombre mismo que se presenta de manera distinta y particular en cada país donde se desarrolla; incluso dentro de una misma nación se manifiestan distintas tendencias proyectándose también en todas las artes.

Se desarrolló en la primera mitad del siglo XIX, extendiéndose desde Inglaterra a Alemania hasta llegar a países como Francia, Italia, Argentina, España, México, etc. Su vertiente literaria se fragmentaría posteriormente en diversas corrientes, como el Parnasianismo, el Simbolismo, el Decadentismo o el Prerrafaelismo, reunidas en la denominación general de Posromanticismo, una derivación del cual fue el llamado Modernismo hispanoamericano.
Tuvo fundamentales aportes en los campos de la literatura, la pintura y la música. Posteriormente, una de las corrientes vanguardistas del siglo XX, el Surrealismo, llevó al extremo los postulados románticos de la exaltación del yo.


Características

durante el Trienio Liberal (1820–1823), y que, bajo una capa mitológica,
alude a la famosa frase de Vergniaud poco antes de ser  
guillotinado: «La Revolución devora a sus propios hijos».

El Romanticismo es una reacción contra el espíritu racional y crítico de la Ilustración y el Clasicismo, y favorecía, ante todo:

·       La conciencia del Yo como entidad autónoma y, frente a la universalidad de la razón dieciochesca, dotada de capacidades variables e individuales como la fantasía y el sentimiento.

·       La primacía del Genio creador de un Universo propio, el poeta como demiurgo.

·       Valoración de lo diferente frente a lo común lo que lleva una fuerte tendencia nacionalista.

·       El liberalismo frente al despotismo ilustrado.

·       La originalidad frente a la tradición clasicista y la adecuación a los cánones. Cada hombre debe mostrar lo que le hace único.

·       La creatividad frente a la imitación de lo antiguo hacia los dioses de Atenas.

·       La obra imperfecta, inacabada y abierta frente a la obra perfecta, concluida y cerrada.

Es propio de este movimiento un gran aprecio de lo personal, un subjetivismo e individualismo absoluto, un culto al yo fundamental y al carácter nacional o Volksgeist, frente a la universalidad y sociabilidad de la Ilustración en el siglo XVIII; en ese sentido los héroes románticos son, con frecuencia, prototipos de rebeldía (Don Juan, el pirata, Prometeo) y los autores románticos quebrantan cualquier normativa o tradición cultural que ahogue su libertad, como por ejemplo las tres unidades aristotélicas (acción, tiempo y lugar) y la de estilo (mezclando prosa y verso y utilizando polimetría en el teatro), o revolucionando la métrica y volviendo a rimas más libres y populares como la asonante. Igualmente, una renovación de temas y ambientes, y, por contraste al Siglo de las Luces (Ilustración), prefieren los ambientes nocturnos y luctuosos, los lugares sórdidos y ruinosos (siniestrismo); venerando y buscando tanto las historias fantásticas como la superstición.

El Romanticismo se expandió también y renovó enriqueció el limitado lenguaje y estilo del Neoclasicismo dando entrada a lo exótico y lo extravagante, buscando nuevas combinaciones métricas y flexibilizando las antiguas o buscando en culturas bárbaras y exóticas o en la Edad Media, en vez de en Grecia o Roma, su inspiración.

Frente a la afirmación de lo racional, irrumpió la exaltación de lo instintivo y sentimental. «La belleza es verdad». También representó el deseo de libertad del individuo, de las pasiones y de los instintos que presenta el «yo», subjetivismo e imposición del sentimiento sobre la razón. En consonancia con lo anterior, y frente a los neoclásicos, se produjo una mayor valoración de todo lo relacionado con la Edad Media, frente a otras épocas históricas.

Manifestaciones culturales

El movimiento literario Sturm und Drang (en alemán: 'Tormenta e ímpetu'), desarrollado durante la última mitad del siglo XVIII, fue el precedente importante del Romanticismo alemán.

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Romanticismo Alemán

El Romanticismo alemán no fue un movimiento unitario. Por ello se habla en las historias literarias de varias fases del Romanticismo. Una etapa fundamental fueron los años noventa del siglo XVIII (Primer Romanticismo), pero las últimas manifestaciones alcanzan hasta la mitad del siglo XIX.

Los filósofos dominantes del romanticismo alemán fueron Johann Gottlieb Fichte y Friedrich Wilhelm Joseph Schelling (los fundadores del Idealismo alemán).
Post-romántico se puede considerar a Heinrich Heine.

Romanticismo Francés

El Romanticismo francés tuvo su manifiesto en Alemania (1813), de Madame de Staël, aunque el gran precursor en el siglo XVIII fue Jean-Jacques Rousseau, autor de Confesiones, Ensoñaciones de un paseante solitario, el Emilio, Julia, o La nueva Eloísa y El contrato social, entre otras obras.

En el siglo XIX sobresalieron Charles Nodier, Víctor Hugo, Alphonse de Lamartine, Alfred Victor de Vigny, Alfred de Musset, George Sand, Alexandre Dumas (tanto hijo como padre), entre otros; son los mayores representantes de esta estética literaria.
  
 Lord Byron vestido de albanés,
obra de Thomas Phillips de 1813.

Romanticismo Inglés

El Romanticismo comenzó en Inglaterra casi al mismo tiempo que en Alemania; en el siglo XVIII ya habían dejado sentir un cierto apego escapista por la Edad Media y sus valores de falsarios inventores de heterónimos medievales como James Macpherson o Thomas Chatterton, pero el movimiento surgió a la luz del día con los llamados Poetas lakistas (Wordsworth, Coleridge, Southey), y su manifiesto fue el prólogo de Wordsworth a sus Baladas líricas, aunque ya lo habían presagiado en el siglo XVIII Young con sus Pensamientos nocturnos o el originalísimo William Blake.

Lord Byron, Percy Bysshe Shelley y John Keats son los líricos canónicos del Romanticismo inglés. Después vinieron el narrador Thomas De Quincey, y los ya postrománticos Elizabeth Barrett Browning y su marido Robert Browning, este último creador de una forma poética fundamental en el mundo moderno, el monólogo dramático.

En narrativa destaca el escocés Walter Scott, creador del género de novela histórica moderna con sus ficciones sobre la Edad Media inglesa y escocesa, o las novelas góticas El monje de Matthew Lewis o Melmoth el Errabundo, de Charles Maturin.

Romanticismo español


José de Espronceda es el prototipo de poeta romántico en España. Liberal exaltado, activista político y lírico desbordado, su temprana muerte a los 34 años lo convirtió en el poeta del Romanticismo español por excelencia.

En España el movimiento romántico tuvo precedentes en los afrancesados ilustrados españoles, como se aprecia en las Noches lúgubres (1775) de José de Cadalso o en los poetas prerrománticos (Nicasio Álvarez Cienfuegos, Manuel José Quintana, José Marchena, Alberto Lista...), que reflejan una nueva ideología presente ya en figuras disidentes del exilio, como José María Blanco White. Pero el lenguaje romántico propiamente dicho tardó en ser asimilado, debido a la reacción emprendida por Fernando VII tras la Guerra de la Independencia, que impermeabilizó en buena medida la asunción del nuevo ideario.



Por otro lado, algunos escritores liberales españoles, emigrados por vicisitudes políticas, entraron en contacto con el Romanticismo europeo, y trajeron ese lenguaje a la muerte del rey Fernando VII en 1833. La poesía del romántico exaltado está representada por la obra de José de Espronceda, y la prosa por la figura decisiva de Mariano José de Larra. Un romanticismo moderado encarnan José Zorrilla (dramaturgo, autor del Don Juan Tenorio) y el Duque de Rivas, quien, sin embargo, escribió la obra teatral que mejor representa los temas y formas del romanticismo exaltado: Don Álvaro o la fuerza del sino.

Romanticismo Italiano


El Romanticismo italiano tuvo su manifiesto en la Lettera semiseria di Grisostomo al suo figliolo de Giovanni Berchet (1816) y destaca, sobre todo, por la figura de los escritores Ugo Foscolo, autor del famoso poema Los sepulcros, y Giacomo Leopardi, cuyo pesimismo se vierte en composiciones como El infinito o A Italia. El romanticismo italiano tuvo también una gran novela histórica, I promesi sposi (Los novios), de Alessandro Manzoni.


Romanticismo Estadounidense

El Romanticismo estadounidense, salvo precedentes como William Cullen Bryant, proporcionó a un gran escritor y poeta, Edgar Allan Poe, precursor de una de las corrientes fundamentales del Postromanticismo, el Simbolismo, y a James Fenimore Cooper (discípulo de las novelas históricas de Scott). Se puede considerar un postromántico el originalísimo pensador Henry David Thoreau, introductor de ideas anticipadas a su tiempo como la no violencia y el ecologismo, y autor del famoso ensayo Sobre la desobediencia civil. En los Estados Unidos también se habla de transcendentalismo.

Romanticismo Argentino

 Esteban Echeverría, figura destacada del romanticismo argentino,
escribió «La cautiva» y «El matadero».

El Romanticismo tuvo su primera manifestación en la Argentina con la aparición en 1832 del poema Elvira o la novia del Plata de Esteban Echeverría, quien lideró el movimiento que se concentró en la llamada Generación del 37 y tuvo uno de sus centros en el Salón Literario.

El romanticismo argentino integró la lengua tradicional española con los dialectos locales y gauchescos, incorporó el paisaje rioplatense a la literatura y los problemas sociales.
El romanticismo argentino se produjo íntimamente ligado con el romanticismo uruguayo.

En Hispanoamérica, el contenido nacionalista del romanticismo confluyó con la recién terminada Guerra de Independencia (1810–1824), convirtiéndose en una herramienta de consolidación de las nuevas naciones independientes, recurriendo al costumbrismo como una herramienta de autonomía cultural.

Entre las obras más importantes del movimiento se destacan «La cautiva» y «El matadero», ambas de Echeverría,[3] [4] el Martín Fierro obra maestra de José Hernández, Amalia de José Mármol, Facundo de Domingo F. Sarmiento y el folletín y obra dramática Juan Moreira de Eduardo Gutiérrez, considerado fundador del teatro rioplatense.

Romanticismo Colombiano

Jorge Isaac

Surgió en el siglo XIX y que representa el individualismo, la libertad de creación y la expresión artística, se convirtió en una actitud frente a la vida. En Colombia, coincide con la gesta de la independencia (1810). Se destacan algunos temas, como:

·       El paisaje: El hombre romántico adapta el paisaje a sus sentimientos. Para algunos autores, esta temática es la que justifica la idea de la existencia del romanticismo en Colombia, ya que los autores europeos hablaban de la vuelta a la vida natural y su belleza.

·       La exaltación de lo nacional y lo popular: a través de la voz o la actuación de diversos personajes se reconstruyeron aspectos del folclor y de las expresiones culturales del territorio colombiano.
  • La vida y la muerte: El dilema existencialista se vio reflejado en novelas como María, en las que el hombre sufre por un destino que domina su voluntad. El amor que sienten Efraín y María se ve siempre afectado por los problemas sociales y cuando estos se resuelven, la muerte demuestra la imposibilidad de su amor.
El Romanticismo en Colombia se manifiesta en los géneros narrativo y lírico. Sus principales representantes fueron: José Eusebio Caro, Gregorio Gutiérrez, Julio Flórez, Rafael Pombo y Jorge Isaacs.

Otros romanticismos en Latinoamérica

 Gertrudis Gómez de Avellaneda

Otros nombres que destacan son los cubanos José María de Heredia y Gertrudis Gómez de Avellaneda. Cabe citar también la primera parte de la obra del notable narrador chileno Alberto Blest Gana, cuya producción modelada por el costumbrismo de Balzac se interna en las fisuras del idealismo romántico. También las obras del guatemalteco José Batres Montúfar han sido muy importantes en toda Latinoamérica. Por otra parte, los venezolanos Juan Vicente González y Juan Antonio Pérez Bonalde fueron los representantes del movimiento en ese país.

Lugares de reunión

Los lugares donde se reunían los románticos eran muy diversos. Fuera de las redacciones de las revistas románticas, existían determinadas tertulias, como por ejemplo El Parnasillo en Madrid, o, en París, El Arsenal, del cual, si hemos de creer a Alphonse de Lamartine, «era la gloria Víctor Hugo y el encanto Charles Nodier» (Las Noches, de Alfred de Musset, precedida del estudio de dicho poeta por A. Lamartine. Madrid: Biblioteca Universal, 1898). En este cenáculo reuníanse entre otros Alfred de Musset, Alfred de Vigny, Boulanger, Deschamps, Emile y Antoine Sainte-Beuve, etc.

Romanticismo musical



Comenzó en Alemania, partiendo de Beethoven y siendo seguido por Carl Maria von Weber en 1786 y Félix Mendelssohn. Es un estilo musical imaginativo y novelesco. Este movimiento afectó a todas las artes y se desarrolló sobre todo en Francia y Alemania.

La estética del romanticismo se basa en el sentimiento y la emoción. En el romanticismo se piensa que la música pinta los sentimientos de una manera sobrehumana, que revela al hombre un reino desconocido que nada tiene que ver con el mundo de los sentimientos que le rodea.

El espíritu romántico

El estilo vital de los autores románticos despreciaba el materialismo burgués y preconizaba el amor libre y el liberalismo en política, aunque hubo también un Romanticismo reaccionario, representado por Chateaubriand, que preconizaba la vuelta a los valores cristianos de la Edad Media. El idealismo extremo y exagerado que se buscaba en todo el Romanticismo encontraba con frecuencia un violento choque con la realidad miserable y materialista, lo que causaba con frecuencia que el romántico acabara con su propia vida mediante el suicidio. La mayoría de los románticos murieron jóvenes. Los románticos amaban la naturaleza frente a la civilización como símbolo de todo lo verdadero y genuino.

Canción de Navidad

 

Frontispicio de Cuento de Navidad, ilustrado por John Leech.
Idioma
Título original
A Christmas Carol
Chapman and Hall
País
Fecha de publicación
Páginas
80 pag.

Canción de Navidad o Un cuento de Navidad (título original en inglés: “A Christmas Carol”) es una novela corta escrita por el británico Charles Dickens en 1843. En ella se habla de cómo una persona huraña puede cambiar su actitud durante la Navidad.

La obra



Argumento

El protagonista es el señor Ebenezer Scrooge, un hombre avaro y tacaño que no celebra la fiesta de Navidad a causa de su solitaria vida y su adicción al trabajo. No le importan los demás, ni siquiera su empleado Bob Cratchit, lo único que le importan son los negocios y ganar dinero.

Una noche, en víspera de Navidad, Scrooge recibe la visita de un fantasma que resulta ser el de su mejor amigo y socio Jacob Marley, que muere siete años antes del inicio de la historia. El espectro le cuenta que, por haber sido avaro en vida, toda su maldad se ha convertido en una larga y pesada cadena que debe arrastrar por toda la eternidad. Le anuncia a Scrooge que ya ha superado el conjunto de sus maldades, por lo tanto, cuando muera tendrá que llevar una cadena mucho más larga y pesada. Entonces le anuncia la visita de tres espíritus de la Navidad, que le darán la última oportunidad de salvarse. Scrooge no se asusta y desafía la predicción.

Esa noche aparecen los tres espíritus navideños: el del Pasado, que le hace recordar a Scrooge su vida infantil y juvenil llena de melancolía y añoranza antes de su adicción por el trabajo; así como por su desmedido afán de enriquecerse.

El del Presente hace ver al avaro la actual situación de la familia de su empleado Bob Cratchit, que a pesar de su pobreza y de la enfermedad de su hijo Tim, celebra la navidad.

Luego el Espíritu le muestra cómo todas las personas celebran la Navidad; incluso el sobrino de Scrooge, Fred, celebra la Navidad de una manera irónica pero alegre (debido a que los invitados no quieren la presencia del avaro). Al final el espíritu muestra a un par de niños de origen trágicamente humano: la Ignorancia y la Necesidad; posteriormente el espíritu desaparece inmediatamente a la medianoche.

El Espíritu del Futuro, mudo y de carácter sombrío, le muestra lo más desgarrador: el destino de los avaros: su casa saqueada por los pobres, el recuerdo sobrio de sus amigos de la Bolsa de Valores, la muerte de Tim Cratchit y lo más espantoso: su propia tumba, ante la cual Scrooge se horroriza finalmente e intenta convencer al espíritu de que está dispuesto a cambiar si le invierte el destino. Al final, el avaro despierta de su pesadilla y se convierte en un hombre generoso y amable.

El cambio lo vive el propio Scrooge cuando finalmente celebra la Navidad, hace que un jovenzuelo le compre el pavo y lo envíe para su empleado Cratchit sin dar a conocer quién lo mandó. Posteriormente sale a la calle para saludar a la gente con una Feliz Navidad y entra en casa de su sobrino Fred para festejar, causando asombro entre los invitados. Con respecto a Cratchit, finge reprenderlo por su llegada tarde al trabajo; le da un aumento de sueldo y va con él para ayudar a la familia y en especial a Tim en su tratamiento de la enfermedad, lo que al final causa felicidad en ellos haciendo memorable la frase del pequeño Tiny Tim: Y que Dios nos bendiga a todos.

Estructura

La obra se divide en tres partes:

·       El Prefacio, que narra como Scrooge se muestra como un viejo avaro que no celebra la Navidad sin importar lo que pase.

·       Los Espíritus:
1.      El del Pasado:



Muestra a Scrooge antes de ser avaro y apático con la Navidad, contrastada entre la soledad de la niñez y la alegría romántica de su juventud.

1.      El del Presente:


Cuenta cómo se celebra la Navidad en su país, su familia y el de la de su empleado Cratchit que es muy feliz, así como los dos niños.

1.      El del Futuro:


Presenta la tragedia de la ruina de Scrooge y la vista a su tumba.

·       La Conclusión, que relata el cambio de Scrooge cuando celebra la Navidad con regocijo y alegría.

Al final se puede ver como Scrooge cambia, se torna con una alegria gigantesca, que tan solo el amor, la solidaridad y la Navidad nos puede dar.

Inspiración

Para escribir la obra, Dickens se basó en la realidad denigrante del Reino Unido durante la revolución industrial en el siglo XIX: el maltrato de los niños y jóvenes que trabajaban y estudiaban en las condiciones más crueles en la sociedad proletaria; para ello, leyó informes del parlamento británico sobre las condiciones de miseria en los menores de edad.
Dickens abogaba por una actitud más benévola y caritativa con los niños, pues las condiciones de la era victoriana les eran adversas como la prostitución, la mendicidad, el trato a los obreros y el aumento de la población a consecuencia de la industrialización del país y el colonialismo británico en el mundo.
En la parte literaria, Dickens escribió una obra similar a Cuentos de Navidad: Los papeles póstumos del Club Pickwick; publicada en diciembre de 1839.

Personajes Principales

Ebenezer Escrooge


Los tres Espíritus del Pasado, Presente y Futuro
  
Personajes secundarios

  •  Bob Cratchit: Empleado de Scrooge. 
  • Jacob Marley: Antiguo socio de Scrooge.
  • Belle: Antigua prometida de Scrooge.
  • Fred Honeywell: Sobrino de Scrooge.
  • Fanny Scrooge: Hermana menor de Scrooge.
  • Sr. Fezziwig: Antiguo jefe de Scrooge.
  • Tiny Tim: Hijo de Bob Cratchit.
  • Familia Cratchit
  • Sra. Fezziwig: Madre del Sr. Fezziwig.
  • Sra. Dilber
  • Joe: Comprador de objetos embargados.
  • Caroline (la esposa de un deudor de Scrooge)
Aspectos

La obra de Dickens muestra una gama de aspectos que se tienen en cuenta.
  • Sociales y morales
  1. Las diferencias sociales entre ricos y pobres, que van desde la burguesía, pasando por los trabajadores hasta llegar a los niveles denigrantes y miserables.
  2. Actitudes como la avaricia, la bondad, el maltrato, el amor, la alegría, la indolencia y la crítica.
  • Literarios
  1. La obra hereda de los rasgos de la novela gótica, así como de la novela realista.
  2. Contiene temas como el sentimentalismo, el idealismo, el romanticismo y el subjetivismo.
Aceptación triunfal

Inmediatamente después de su publicación, la obra tuvo un éxito rotundo que se divulgaría dentro de su país de origen y luego alrededor del mundo. El propio autor recibió numerosas cartas de felicitación y elogio y con ello revivió la navidad en el Reino Unido, que había estado prohibida en tiempos de Oliver Cromwell, así como resaltar la realidad de los hijos de la revolución industrial.
Al paso del tiempo se ha convertido en lectura obligatoria para todo el que celebre las festividades navideñas de cada año; incluso desde la segunda mitad del siglo XX existen versiones y adaptaciones de dibujos animados, cine, radio y televisión





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